Se vació el parque Indoamericano. Ya no hay gente viviendo allí. Macri dio una nota en la jornada de hoy desde el lugar, tan trascendente en la última semana. El jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires nos presentó a los gendarmes que se encuentran en el sitio. Se están realizando pericias y por estas horas ya estarán trabajando los camiones y recolectores de basura que limpiarán y desinfectarán los terrenos.
Mauricio Macri puso énfasis en los vecinos de Villa Soldati, ya que él manifestó que este logro se da "para alegría de los vecinos". Y los lugareños deben estar festejando, porque nunca antes pudieron disfrutarlo, los chicos nunca jugaban en el parque, ni tenían espacios verdes en condiciones para gozar de tardes al aire libre antes de la llegada de los usurpadores. No era demasiado tenido en cuenta el sur de la Capital Federal. No son muy tenidos en cuenta por el personaje en cuestión los sectores más humildes de la población. La escapatoria al problema que Macri buscó fue nuevamente la represión policial, para lo cual también solicitó colaboración del Gobierno Nacional ya que la flamante Policía Metropolitana al parecer no estaba lo suficientemente capacitada. De esta manera se produjeron los primeros cruces con Anibal Fernández, quien permanentemente sostuvo la salida política para erradicar el problema que acaparó la atención de todos, algo que finalmente ocurrió luego de varias reuniones nación-ciudad.
Se habló mucho de discriminación, ya que Macri responsabilizó a las comunidades de países latinoamericanos en Argentina por los hechos ocurridos. Es necesario destacar que los "usurpadores" no eran en su totalidad bolivianos, paraguayos ni peruanos, ya que había un gran número de argentinos en el lugar. Todos ellos unidos por una condición: la pobreza. Las necesidades de cubrir lo básico para vivir. Gente que hasta entonces vivía en lugares casi inhabitables, compartiendo un baño con otras familias, lejos de respetar la higiene y otros factores que llevan a una óptima calidad de vida. La gente necesita una solución política, por eso se adoptó finalmente en Capital Federal el plan de vivienda nacional, que permitará a este sector de la población acceder a un crédito blando para obtener una vivienda y escapar a la desesperante situación.
La película de los últimos días parece ir encaminándose hacia el final felíz, pese a dejar un saldo de tres víctimas fatales. Lo ocurrido sirve para desnudar falencias en la gestión política. Lamentablemente olvidando que es mejor prevenir que curar, pero positivo para que el Jefe de Gobierno Porteño entienda que el sur también existe, y aunque nos duela, debemos dejar un tiempo de lado el pensamiento en las calles "a la europea" que nos mostraba un mundo fantástico entre bicisendas y poca contaminación ambiental, para empezár a focalizar en un problema un poco más serio que afecta a un sector de la población: la pobreza.
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